El servicio satelital de Elon Musk será una realidad en el país en este 2022. Revisá con tu dirección si tenés cobertura.

La compañía ya había ingresado formalmente al mercado local en marzo, cuando se creó y publicó en el Boletín Oficial del 15 de marzo Starlink Argentina S.R.L., bajo control de las firmas en los Países Bajos, Starlink Holdings Netherlands, y Space X Netherlands.

“Starlink anticipa ofrecer servicio en su área a partir del cuarto trimestre de 2022. La disponibilidad está sujeta a la aprobación reglamentaria. Los pedidos se completarán por orden de llegada en cada área de cobertura”, se detalla en la web oficial.

Por ahora, el precio indicado en la web oficial de Starlink para Argentina es de 99 dólares mensuales. Ya se puede hacer el depósito por anticipado llenado un formulario con nombre, teléfono y correo eletrónico.

Es decir, que al cambio del “dólar tarjeta” (75% impuestos) del 4 de agosto, se trata de casi $24.100.

Respecto al costo de instalación, aún no se ha difundido oficialmente. Sin embargo trascendió que rondaría los 499 dólares por única vez.

El servicio ya funciona en países de la región latinoamericana como México, Chile y Brasil.

La idea de la empresa Starlink es tener alrededor de 12.000 satélites en órbita, y que luego una persona o una compañía pueda pagar una mensualidad para conectarse desde cualquier lado con el dispositivo que tenga. Su idea no es competir con la fibra o las conexiones 5G, sino complementar ambas ofertas con la suya.

Las conexiones por Starlink consiguen velocidades entre 50 Mbps y 150 Mbps, con una latencia de entre 20 y 40 milisegundos.

Por lo tanto, es más una red pensada para aquellas zonas de la geografía donde no llega la fibra, y las conexiones 4G o 5G se quedan cortas.

Debido a que los satélites Starlink están en una órbita baja, el tiempo de datos de ida y vuelta entre el usuario y el satélite, también conocido como latencia, es mucho menor que con los satélites en órbita geoestacionaria.

La persona que contrata el servicio recibirá un kit para montar la antena en el lugar. Está configurado para una zona geográfica determinada, o sea que no se puede prestar.

La antena se tiene que enchufar y apuntar al cielo. Trabajará con el router que viene incluido en el kit.